Por Ramiro Francisco
Hemos adoptado una posición de no adentrarnos respecto a las luchas internas de los partidos políticos, aunque esto no nos excluye aún desde lejos, hacer algunas puntualizaciones y propuestas.
Propuestas hasta donde se puede, por aquello de que los partidos políticos, contribuyen al sostenimiento y fortaleza en países democráticos.
Es difícil, por qué negar – como la hermosa canción del maestro Agustín Lara – que el sistema de encuesta para escoger candidatos en algunos partidos ha sido frustrante.
Los hechos hablan por sí. Las demandas en tribunales electorales están todavía, sobre el tapete.
Habiendo hecho esa introducción, vamos al grano. No soy de la FP, ni de partido alguno. Voté abiertamente por Abinader. No jugamos a las escondidas ni somos del Norte y del Sur. En ese partido como en todos, tenemos amigos a quienes admiramos por su sencillez, trabajo, honestidad y dedicación.
Uno de esos –voy directo – es Francisco Lantigua, con quien me honra trabajar en un medio de comunicación televisivo, durante algunos años.
El más votado en las pasadas elecciones por la Fuerza del Pueblo y tenemos entendido, no le fue reservada su candidatura.
Son amplios los sectores o segmentos sociales de Puerto Plata, que le muestran un amplio respaldo, debido a su seriedad y espíritu responsable para realizar un encomiable trabajo en la Cámara de Diputado.
Encuestas van y vienen, ha habido impugnaciones y nuevas encuestas, hasta el momento el Lic. Lantigua, ha resultado ganador.
¿A qué sector poderoso perjudica su candidatura en el partido de Leonel Fernández? ¿Qué tan fuerte en ese partido aquí en Puerto Plata es la rastrería, egoísmo y la envidia?
¿Por qué la dirección local de esa organización política, NO se ha pronunciado sobre el particular?
Ahora que abogamos por lo mejor para las candidaturas electorales, que el Altísimo, le dé Sabiduría para entender sus planes.
