Por Ramiro Francisco
Desconocemos el valor monetario de una sencilla o sofisticada cámara de seguridad, para ser instalada en oficinas, pasillos, patios, frente a edificios, hospitales e instalaciones carcelarias.
Por igual, las cámaras pequeñas o diminutas, para ser llevadas por personal de seguridad, guardianes, vigilantes, policías, miembros DNCD, DICRIM, FAD, ED, o la Armada y de aduanas, solamente cuando estén en servicio de patrullas.
Lo mismo, para ser usadas por personal de aeropuertos, cuando necesiten interrogar a alguien sospechoso. También inspectores de Aduanas al realizar inspección a contenedores.
Se daría un gran paso, hacia la transparencia, respeto y ganancia de credibilidad.
Quien se resista a ese “plan piloto”, entonces, no es muy puro para el desempeño del trabajo asignado.
Admito, que no es tan fácil como el escribirlo. Pero se puede, si se toma en cuenta que, para correr cien metros en pista plana, y llegar a la meta, hay que realizar la salida.
Al ser una propuesta un poco innovadora para nuestro país, se esperan respuestas positivas y contrarias. Argumentos enriquecedores. Enriquezca si desea, con su opinión.