Lic. Ramiro Francisco
Llegamos entonces, a la llamada semana crucial o decisiva en la campaña electoral con miras a las elecciones municipales. Tiempo en el que un error político, un ruido, puede dar al traste, descomponer y echar por el suelo todo el buen trabajo realizado.
La prudencia, el tacto, el buen comportamiento, la diplomacia, se hacen necesarias, para finalizar de manera apropiada, correcta o buena, lo iniciado con tantos sacrificios y buena voluntad.
Cada candidato, partido, asesor o seguidor, de quienes compiten por la posición de Alcalde o Concejal, creen y sostienen superar las expectativas electorales para convertirse en ganadores de las elecciones municipales a celebrarse este venidero domingo 18.
No podemos pretender ver el futuro, ni leer la taza o la bola de cristal. Lo que sí sabemos, es que habrá ganadores y perdedores.
Quienes alcancen la victoria ojalá y lo hagan con humildad, gratitud y gallardía. Aquellos que “casi ganan”, reconozcan con honor y entereza la victoria ajena.
Que cada quien, cumpla con su deber patrio y ciudadano donde le corresponda. Nosotros, los simples votantes, delegados y directivos de mesas electorales, policía electoral y la JCE, como árbitro general, de manera que sean unas elecciones ejemplares como verdadera fiesta de la democracia.
Tan solo faltan algunos días. La embarcación surca los mares. A veces, bravío y picado. Otras, suave, en calma y con vientos a favor.
El Señor Misericordioso, bendiga República Dominicana.